En un desarrollo impactante desde Perú, el Ministro de Educación, Morgan Quero, ha provocado indignación nacional e internacional al referirse a las violaciones de más de 500 niñas en la comunidad indígena Awajún como una «práctica cultural».
Las declaraciones surgieron en el contexto de la inauguración de la escuela Bicentenario San Juan Macías, en Condorcanqui, Amazonas, una región conocida por sus comunidades indígenas.
Morgan Quero anunció que ha enviado una comisión de profesionales para investigar y proteger a las escolares víctimas de estos presuntos abusos sexuales perpetrados por profesores en la región. Según Quero, se deben tomar medidas firmes si se confirman las denuncias.
Durante su discurso, dijo: «Si es una práctica cultural que lamentablemente sucede en los pueblos amazónicos para ejercer una forma de construcción familiar con las jovencitas, nosotros vamos a ser muy prudentes, pero también exigiremos una respuesta».
El Ministerio de Educación de Perú confirmó haber recibido denuncias contra docentes, tanto contratados como nombrados, por agresiones sexuales a estudiantes entre 2010 y 2024. Hasta la fecha, 112 docentes han sido destituidos y 4 cesados temporalmente. En junio de 2020, la Unidad de Gestión Educativa Local (UGEL) reportó un incendio que destruyó todos los expedientes y pruebas relacionadas con estas denuncias.
Rosemary Pioc, presidenta del Consejo de Mujeres Awajún, reveló que tienen un registro de 524 acusaciones formales contra docentes por abuso sexual a menores. Pioc explicó que la UGEL no tiene los recursos necesarios para procesar adecuadamente las denuncias debido a la falta de infraestructura y la complejidad administrativa. Además, relató que muchas víctimas no pueden acceder a la justicia debido a barreras lingüísticas y geográficas.
En respuesta a la difusión de los más de 500 casos de abuso sexual en Amazonas por parte de La República, el ministro Quero aseguró que su gestión ha retirado a cientos de trabajadores de educación involucrados en varios delitos y está apoyando a las víctimas de Condorcanqui.
«Rechazo enfáticamente la tergiversación de las declaraciones que di el pasado 10 de junio en torno a los graves hechos ocurridos desde el año 2010 en algunas comunidades de la región Amazonas. Mi posición es clara y categórica: rechazo total y absolutamente cualquier forma de abuso y violencia, especialmente contra niños y niñas», expresó Quero.
La comunidad Awajún, tras años de espera por justicia, sigue luchando por la protección de sus niñas y la erradicación de estas prácticas atroces. La esperanza recae en que las autoridades actúen con la
