Juez promueve reinserción laboral para jóvenes en vez de condenarlos a prisión. Un juez en California, John Phillips, se sintió abrumado por la cantidad de jóvenes que estaba enviando a prisión debido a delitos cometidos en su adolescencia y decidió pensar en una solución.
En 2003, decidió buscar una alternativa al sistema penitenciario convencional, fundando Rancho Cielo en Salinas, utilizando un antiguo centro de detención juvenil. Esta organización ofrece programas de capacitación vocacional, una academia culinaria y una escuela privada, dirigidos específicamente a jóvenes en riesgo o en situación de pobreza.
Inicialmente, Rancho Cielo se centraba en trabajar con jóvenes delincuentes, pero con el tiempo amplió su alcance debido al empeoramiento de la situación en Salinas, que en 2015 registró más asesinatos de menores que cualquier otro lugar del país.
La organización comenzó a visitar escuelas secundarias, cárceles, centros de detención juvenil y refugios, buscando ofrecer una oportunidad a los jóvenes más vulnerables y orientarlos hacia un futuro mejor.
Rancho Cielo ofrece una variedad de programas prácticos, desde carpintería hasta cuidado ecuestre, impartidos por expertos de la industria.
Además de clases académicas tradicionales, se imparten cursos sobre redacción de currículums, habilidades para entrevistas y otros aspectos de la vida profesional. Esta combinación de educación práctica y académica busca preparar a los estudiantes para el éxito en el mundo laboral.
Aunque algunos estudiantes no logran completar el programa, el 84.8% de los delincuentes primerizos que asisten a Rancho Cielo nunca reinciden, en comparación con una tasa de reincidencia del 40% en el condado.
A pesar de ofrecer una amplia gama de servicios, enviar a un niño a Rancho Cielo cuesta solo $25,000, en comparación con los $110,000 que cuesta alojarlo en prisión. Esta iniciativa demuestra que existen alternativas efectivas al encarcelamiento juvenil, centradas en la educación, el apoyo y la reinserción social.
La experiencia de Rancho Cielo sugiere que invertir en la educación, el apoyo emocional y las habilidades laborales puede tener un impacto positivo a largo plazo en la vida de los jóvenes en riesgo, brindándoles una segunda oportunidad para construir un futuro mejor.