El deshielo del Everest saca a la luz cadáveres de montañistas y toneladas de basura

El cambio climático ha provocado el deshielo del Monte Everest, exponiendo los cuerpos de montañistas fallecidos y toneladas de basura acumulada. Este fenómeno ha impulsado a equipos de rescate a recuperar los cadáveres y limpiar la montaña.


Desde que comenzaron las expediciones en la década de 1920, más de 300 personas han perdido la vida en el Everest. Muchos cuerpos permanecen enterrados bajo la nieve, mientras que otros sirven como macabros puntos de referencia para los escaladores, conocidos como “Botas Verdes” y “La Bella Durmiente”.

Recuperación y limpieza

Este año, un equipo especializado emprendió una misión para recuperar restos de montañistas y limpiar la montaña. En esta campaña, patrocinada por el gobierno de Nepal, se recuperaron cinco cuerpos. Aditya Karki, líder del equipo, explicó que el calentamiento global está reduciendo la capa de nieve, haciendo más visibles los cuerpos y la basura.

Recuperar cuerpos en altitudes extremas es costoso y peligroso, requiriendo hasta ocho rescatistas por cadáver. Los cuerpos pueden pesar más de 100 kilogramos, complicando la tarea a esas altitudes.

Impacto ambiental

Además de los cuerpos, el Everest está lleno de basura, incluidos equipos de escalada y cilindros de gas vacíos. A pesar de los esfuerzos para retirar los desechos generados por expediciones modernas, la basura histórica sigue siendo un problema. Karki subrayó la importancia de estas misiones para evitar que las montañas se conviertan en un cementerio.


Un legado de aventureros

El caso del escalador británico George Mallory, cuyo cuerpo fue descubierto en 1999 tras desaparecer en 1924, es un ejemplo de los secretos que guarda el Everest.

La montaña requiere esfuerzos para su preservación y respeto, mostrando el compromiso de los montañistas y las autoridades por mantenerla limpia y segura para futuras generaciones.

Inzpira News

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