Dos adolescentes de Woodlands, Texas, han creado un innovador dispositivo que promete ser una solución para la creciente crisis de contaminación por microplásticos.
Victoria Ou y Justin Huang, ambos de 17 años, han desarrollado un aparato que utiliza ondas sonoras ultrasónicas para eliminar estos microplásticos del agua, un método que ha demostrado ser efectivo y tiene el potencial de revolucionar la limpieza de aguas contaminadas.
Los microplásticos
Que se encuentran en todos los rincones del planeta, desde las profundidades del océano hasta la cima del Monte Everest, representan una amenaza significativa para la salud humana y ambiental.
Estas diminutas partículas han sido detectadas en el polvo doméstico, los alimentos, el agua potable, e incluso en el cuerpo humano, incluyendo pulmones y sangre.
La investigación sugiere que una persona promedio podría estar ingiriendo y respirando hasta una tarjeta de crédito de microplásticos cada semana, lo que plantea serias preocupaciones sobre sus efectos a largo plazo.
El dispositivo
Se asemeja a un bolígrafo en tamaño, utiliza dos estaciones de transductores eléctricos que generan ondas de ultrasonido.
Estas ondas crean presión dentro del dispositivo, empujando los microplásticos hacia atrás mientras permiten que el agua limpia fluya hacia adelante. En pruebas preliminares, el dispositivo ha demostrado ser capaz de eliminar entre el 84% y el 94% de microplásticos en una sola pasada.
El proyecto de los jóvenes fue presentado en la Feria Internacional de Ciencia e Ingeniería Regeneron (ISEF) en Los Ángeles, donde se destacaron entre los competidores y ganaron el primer lugar en la categoría de Ciencias de la Tierra y el Medio Ambiente patrocinada por Google.
Además, recibieron el prestigioso Premio Gordon E. Moore por Resultados Positivos para las Generaciones Futuras, junto con un premio de $50,000.
El dispositivo de los adolescentes podría tener aplicaciones amplias, desde plantas de tratamiento de aguas residuales hasta instalaciones industriales y fuentes de agua rurales. Además, su tecnología podría adaptarse para uso doméstico, como en lavadoras y peceras.
Este avance es un ejemplo del ingenio y la creatividad de las nuevas generaciones en la lucha contra los problemas medioambientales más apremiantes del mundo.
