El desarrollo del videojuego presentaba una «deficiencia» que contribuyó a hacerlo considerablemente más accesible para los jugadores.
El legendario videojuego, Super Mario Bros, es recordado por muchos como un desafío difícil, pero en realidad su desarrollo contenía un elemento que facilitaba su jugabilidad. Este secreto se mantuvo en silencio durante casi cuatro décadas.
Lanzado por Nintendo en 1985, el juego tenía un aspecto que hacía que los jugadores tuvieran menos probabilidades de morir al tocar a los enemigos.
Esto se debía a que los hitboxes, utilizados para definir el rango de daño de los enemigos, eran considerablemente más pequeños que el tamaño real de los mismos. Esto permitía a los jugadores acercarse más a los enemigos sin sufrir daño.
El descubrimiento de este secreto, realizado por una cuenta de Twitter llamada @MarioBrothBlog, reveló que el diseño de los hitboxes en el juego era más pequeño de lo que debería ser, lo que otorgaba una flexibilidad adicional a los jugadores para esquivar a los enemigos.
Este aspecto del diseño, probablemente implementado para hacer el juego más accesible y menos complicado, fue crucial en un juego que requería saltos precisos y agilidad para superar los desafíos de las plataformas.
La cuenta que reveló este secreto también publicó un video corrigiendo el tamaño de los hitboxes, lo que alteró significativamente la experiencia del juego haciéndolo más desafiante y requiriendo movimientos más precisos por parte de los jugadores.
Aunque Nintendo no tiene nuevos juegos de Mario en desarrollo en este momento, ha confirmado el lanzamiento de dos títulos remasterizados para Switch: Paper Mario: The Thousand-Year Door, programado para el 23 de mayo de este año, y Luigi’s Mansion 2, que llegará el 27 de junio.
Además, se ha confirmado la secuela de la película de Mario, producida por Illumination, que llegará a los cines el 3 de abril de 2026. Los fanáticos de la franquicia aguardan con expectación estas emocionantes novedades, que revitalizarán el mundo de Mario Bros.
