Nelson Malone, residente de medicina de urgencias en Johns Hopkins, trabaja diariamente en el mismo hospital donde su abuela, Marion Malone, limpió pisos y habitaciones hace siete décadas para mantener a su familia. La conexión entre sus historias es un poderoso recordatorio de perseverancia, servicio y justicia social.
De la limpieza de pisos al servicio médico
Marion Malone trabajó en el Hospital Johns Hopkins en la década de 1950, contribuyendo con su labor a los ingresos familiares en tiempos difíciles. Décadas después, su nieto Nelson transita los mismos pasillos, no como personal de limpieza, sino como médico encargado de atender emergencias críticas.
“Es un privilegio estar aquí, sirviendo en el mismo lugar donde mi abuela trabajó para que nuestra familia pudiera salir adelante. Pienso en ella cada día mientras trato de marcar la diferencia en la vida de mis pacientes”, compartió Malone.
Aunque Marion falleció en 2022, pudo presenciar la graduación de su nieto de la Facultad de Medicina de Harvard en 2021. Ese momento marcó un hito en una historia familiar llena de sacrificios y logros.
Compromiso con la justicia social en la medicina
Desde el inicio de su carrera, Malone se ha destacado como un defensor de la equidad en el acceso a la atención médica. Graduado de la Universidad Howard como estudiante de primera generación, desarrolló un interés especial en abordar desigualdades raciales en la medicina. Durante su paso por la Facultad de Medicina de Harvard, lideró iniciativas como la Coalición de Justicia Racial, trabajando para crear conciencia sobre las barreras que enfrentan las minorías en el campo médico.
Actualmente, Malone es miembro activo de Black Men in White Coats, una organización que busca aumentar la representación de hombres negros en la medicina, un colectivo que representa solo el 2% de los médicos en Estados Unidos. “Es crucial que trabajemos para inspirar y guiar a las próximas generaciones de médicos negros”, señaló.
Medicina de urgencias con un enfoque social
En su labor diaria en el departamento de emergencias, Malone enfrenta condiciones críticas como ataques cardíacos, accidentes cerebrovasculares y crisis psiquiátricas. Además, busca ampliar el alcance de su trabajo con un enfoque en la medicina de emergencia social, que utiliza el departamento de urgencias como un puente hacia servicios comunitarios esenciales.
“Mi meta es no solo atender emergencias médicas, sino también abordar las causas sociales subyacentes que afectan la salud de mis pacientes, como la inseguridad habitacional y la falta de acceso a recursos básicos”, explicó Malone.
Un llamado a la diversidad en la medicina
Sherita Golden, directora de diversidad de Johns Hopkins Medicine, destacó la importancia de atraer y retener talento diverso en el ámbito médico. Desde 2019, la proporción de residentes médicos provenientes de grupos subrepresentados ha aumentado del 14% al 21%, con una meta futura del 30%. “Es fundamental innovar y fomentar la inclusión en nuestra fuerza laboral biomédica”, afirmó Golden.
Golden también subrayó iniciativas como las clínicas móviles y los programas de vacunación comunitaria contra la COVID-19, que han fortalecido la confianza de la comunidad en el sistema de salud de Johns Hopkins.
La trayectoria de Nelson Malone honra el sacrificio de su abuela, mientras trabaja para crear un sistema de salud más equitativo. Su historia resalta cómo las oportunidades, el esfuerzo y el compromiso personal pueden transformar vidas y marcar una diferencia significativa en la comunidad.