Tras semanas de intensas protestas, la primera ministra de Bangladesh, Sheikh Hasina, dimitió y abandonó el país, poniendo fin a un mandato de 15 años.
Origen de las protestas
Las manifestaciones comenzaron en julio, lideradas por estudiantes que rechazaban el polémico sistema de cuotas en los puestos gubernamentales. La propuesta asignaba el 30% de estos puestos a familiares de veteranos de la guerra de independencia, lo que muchos consideraban injusto y discriminatorio.
A medida que las protestas crecían, el 15 de julio, el gobierno impuso un toque de queda, cerró escuelas y suspendió servicios de internet. Las manifestaciones se intensificaron, y a finales de mes, se reportaron al menos 150 muertos, aunque medios independientes y organizaciones contabilizan más de 200.
Crisis económica y demandas adicionales
La situación económica del país, con empleos escasos para los jóvenes y una caída en las exportaciones, agravó la indignación popular. Aunque el gobierno implementó nuevas normativas laborales y restauró el internet, los manifestantes exigieron investigaciones transparentes sobre las muertes de civiles y la renuncia de Hasina y su gabinete.
El 5 de agosto, la cifra de muertos ascendía a al menos 300, con 94 registrados el domingo anterior. Ante la presión, Sheikh Hasina anunció su dimisión este lunes. Durante su mandato, aunque la economía de Bangladesh se recuperó de años de pobreza, se le acusó de malos manejos administrativos y de aferrarse al poder. También se le señaló de intolerancia política, calificando a varios rivales de «terroristas».
Respuesta de los manifestantes y el nuevo gobierno
El anuncio de su dimisión fue bien recibido por los manifestantes, que incluso irrumpieron en su residencia. El general Waker-uz-Zaman prometió la formación de un nuevo gobierno y una investigación sobre las represiones. “Mantengan la fe en los militares, investigaremos todos los asesinatos y castigaremos a los responsables. He ordenado que ningún ejército ni policía realice disparos. Ahora el deber de los estudiantes es mantener la calma y ayudarnos”, declaró el general.
