Un chico cumple su promesa de ir con un vestido al funeral de su mejor amigo

Barry Delaney desafió las expectativas al honrar un pacto que había hecho con su mejor amigo, Kevin Elliott, quien lamentablemente falleció en acción en Afganistán.


Este acuerdo poco convencional, implicaba que Delaney usaría un vestido si Elliott moría en el servicio militar. Para Barry, este pacto era más que una simple promesa; era un tributo a la amistad y un acto de lealtad inquebrantable.

Barry cumplió su parte del acuerdo al ponerse un llamativo vestido verde lima, junto con unos calcetines rosas, en el décimo piso de un edificio en Dundee. Mientras se servía su bebida favorita, vodka puro, Barry recordaba las conversaciones compartidas con Elliott durante su última pausa de dos semanas en casa antes de regresar a Afganistán.

El funeral de Elliott atrajo a una multitud de mil personas en la iglesia de Santa María en Dundee, pero nadie cuestionó la decisión de Barry de vestirse de esa manera. Para él, era una forma de cumplir su promesa y rendir homenaje a su amigo caído.


La ceremonia fue emotiva, con abrazos reconfortantes y palabras de consuelo. Barry se mantuvo firme mientras se leían los elogios en el cementerio de Barnhill, pero el dolor se hizo evidente cuando los fusileros de la Guardia Negra dispararon salvas en honor a Elliott. Barry se desplomó junto a la tumba de su amigo, abrumado por la pérdida.

Elliott había compartido con Barry sus temores y ansiedades sobre su servicio en Afganistán. Las cartas que recibió Barry revelaron la intensidad del conflicto y el miedo que Elliott enfrentaba diariamente en el campo de batalla.

A pesar de su valentía y determinación, Elliott estaba profundamente afectado por las experiencias traumáticas que presenció en Afganistán. Su deseo de volver a casa se entremezclaba con la angustia y el temor que sentía por su seguridad.


Para Elliott, servir en Afganistán era un desafío mucho mayor que sus experiencias anteriores en Irak. La situación en Helmand, según lo expresado por él mismo, era extremadamente peligrosa y angustiante. Aunque anhelaba la estabilidad y la seguridad de casa, también se sentía impulsado por el deseo de cumplir su deber y servir a su país.

La muerte de Elliott dejó un vacío en la vida de Barry y en la de todos los que lo conocieron. Su sacrificio y su coraje serán recordados con gratitud y respeto por siempre, y el gesto de Barry al cumplir su promesa es un tributo conmovedor a la amistad y al compañerismo que compartieron.

Inzpira News

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