El regreso de Butch Wilmore y Sunita Williams marcó el final de una misión que originalmente estaba programada para durar ocho días, pero que se prolongó por más de nueve meses debido a fallos técnicos. La cápsula Crew Dragon “Freedom”, de SpaceX, amerizó en el Golfo de México cerca de la costa de Florida el 16 de marzo a las 21:57 GMT, transportando también a Nick Hague y Aleksandr Gorbunov.
Una misión que se alargó más de lo previsto
La NASA había enviado a Wilmore y Williams a bordo de la nave Starliner, de Boeing, el 5 de junio de 2024, como parte de su primer vuelo tripulado. Sin embargo, múltiples problemas en el sistema de propulsión de la nave, incluidas fugas de helio y fallos en los propulsores de control de reacción, impidieron su regreso inmediato.
Los astronautas continuaron con sus actividades en la Estación Espacial Internacional (EEI) mientras ingenieros de la NASA intentaban solucionar los problemas de la nave. A pesar de los esfuerzos, la agencia espacial tomó la decisión de enviar la cápsula Crew Dragon «Freedom» para traer de vuelta a los tripulantes de manera segura.
El esperado regreso a la Tierra
Wilmore y Williams abordaron la cápsula junto a Hague y Gorbunov, dejando la EEI el 16 de marzo a las 03:05 GMT. La astronauta Anne McClain, desde la estación, se despidió con un emotivo mensaje: «Los extrañaremos. Tengan un excelente viaje a casa».
La NASA inició el descenso a las 20:45 GMT, siguiendo un proceso meticuloso que incluyó la desorbitación y el despliegue de paracaídas para reducir la velocidad antes del amerizaje. Cuarenta minutos después del impacto en el mar, equipos de rescate abrieron la cápsula, marcando el primer contacto de los astronautas con aire fresco tras meses en el espacio.
Un hito para la exploración espacial
A pesar de los desafíos, Wilmore y Williams contribuyeron con investigaciones científicas cruciales y realizaron varias caminatas espaciales. Williams, además, estableció un nuevo récord como la mujer con más horas de caminata espacial, acumulando 62 horas y seis minutos en misiones extravehiculares.
La experiencia de estos astronautas demuestra la capacidad de adaptación en misiones espaciales y resalta la importancia de contar con protocolos de contingencia para futuras exploraciones. Ahora, con Crew-10 en la EEI, la NASA sigue adelante con su programa de exploración, garantizando la continuidad de sus investigaciones en órbita.
