Matthew Prebish, piloto de Southwest Airlines, tomó una decisión inesperada durante un vuelo: adoptar a una de las mascotas a bordo, un gatito llamado Avery. En una misión de rescate organizada por Greater Good Charities y Lucky Dog Animal Rescue, la aerolínea transportó a más de 100 animales de albergues del sureste de Estados Unidos afectados por los huracanes Milton y Helene.
“La adopción en pleno vuelo no era parte del plan, pero algunas cosas están destinadas a suceder”, comentó Mirah Horowitz, fundadora de Lucky Dog Animal Rescue, sobre el vínculo instantáneo que se dio entre el capitán Matt y la gatita Avery.
Un vuelo con un propósito especial
El vuelo, operado por Southwest Airlines, ayudó a trasladar a 145 mascotas necesitadas de cuidados. Whitney Eichinger, vicepresidenta de comunicaciones de la aerolínea, señaló: “Lideramos con nuestros corazones para proporcionar ayuda donde se necesita y fue un honor prestar un avión para este vuelo de rescate.”
Las mascotas, provenientes de refugios en Tennessee y Florida, llegaron al Campus de Rescate de Animales de Lucky Dog en Carolina del Sur. Horowitz explicó que, tras el huracán Helene, supieron que era necesario intervenir en las áreas afectadas y que su equipo estaba perfectamente posicionado para recibir a las mascotas en peligro.
Una misión que da frutos
En este vuelo, Lucky Dog Animal Rescue transportó más de 150 mascotas al Aeropuerto Internacional Mitchell de Milwaukee, en Wisconsin, desde donde luego se trasladaron a ocho refugios más. Durante las últimas dos semanas, la organización ha ayudado a cerca de 350 animales. Horowitz expresó la satisfacción de ver a Avery encontrar un hogar, comentando: “Pasar de ser un gatito no deseado y sobreviviente de un huracán a un querido miembro de la familia hace que cada esfuerzo valga la pena.”
Cuidado y tratamiento para los más frágiles
Previo al vuelo, las mascotas pasaron por un examen veterinario y obtuvieron los certificados necesarios para viajar. Sin embargo, algunas mascotas, como un bulldog llamado Carl, no pudieron volar debido a problemas de salud. Los rescatistas han comenzado su tratamiento, mientras más de una docena de gatos también reciben cuidados por infecciones respiratorias tras el viaje.
El acto de adopción de Prebish no solo reflejó la dedicación y cuidado hacia los animales, sino que también personificó la misión de estas organizaciones, demostrando que los rescates pueden marcar una diferencia en las vidas de estos animales y en las de quienes los reciben con los brazos abiertos.